Last Minute Customers se despide en Los Clásicos de Cuenca con un concierto histórico
Último concierto de la Banda bajo el nombre de ‘Last Minute Customers’ en Pub Los Clásicos de Cuenca: rock setentero, energía desbordante y revelación de su nuevo nombre.
El próximo 18 de octubre de 2025, el emblemático Pub Los Clásicos de Cuenca acogerá uno de los conciertos más esperados de la temporada: la despedida de Last Minute Customers bajo ese nombre. La banda, que anunciará en directo su nueva identidad artística y desvelará la evolución de su logotipo, promete una velada cargada de rock auténtico, energía y complicidad con el público.
La cita remite inevitablemente al espíritu de aquel recordado rodaje de “Me Suena que Sí”, noche de reencuentros y celebración colectiva en un espacio que sigue latiendo con la mejor música en directo. El Pub Los Clásicos, regentado por Isra y Raquel, se ha consolidado como templo sonoro de Cuenca: lugar de paso para grandes bandas locales, nacionales e internacionales, y refugio donde las guitarras rugen, las voces estremecen y la cerveza artesana de la ciudad acompaña cada acorde.
Formados en 2017, los Last Minute Customers surgieron con la ambición de revitalizar el espíritu del rock de los años 70, añadiendo matices de rock de raíces, un groove contagioso y la fuerza del hard rock contemporáneo. Su repertorio, en inglés y castellano, construye una experiencia rica, vibrante y honesta.
La banda publicó en 2023 su primer sencillo, “Mr. Blue”, preludio del debut discográfico Sold Out!. En febrero de 2025 llegaría “Me Suena que Sí”, confirmando la madurez de un proyecto en constante evolución y que prepara ya su segundo álbum de estudio.
Sobre el escenario, la voz poderosa de Gina Briceño se erige como alma del grupo, arropada por la contundencia de Manuel Molina a la batería, el pulso inconfundible de César Cordente al bajo y las guitarras afiladas de Pedro Notario y Saúl Martínez. Juntos, transforman cada concierto en una celebración del rock honesto y de la cultura de proximidad, donde la cercanía con el público es tan importante como la calidad musical.
El 18 de octubre será, por tanto, una velada para la memoria: un concierto de alto voltaje emocional, donde la banda se despide de una etapa para iniciar otra. No se trata solo de un adiós, sino de una transformación, un nuevo comienzo que quedará sellado en la historia reciente del rock conquense.
Las entradas son muy limitadas, y la expectación es máxima. Si quieres formar parte de este momento único, no tardes en asegurarte la tuya.


